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La capacidad visual y auditiva son dos aptitudes a valorar a la hora de determinar la capacidad de una persona para conducir.

Tanto la visión como la audición pueden alterarse debido a causas diversas, enfermedades, traumatismos, procesos infecciosos, deterioro progresivo por envejecimiento…

En este caso nos referiremos a la alteración de la visión y audición por el envejecimiento, conocidas con el nombre de presbiopia y presbiacusia respectivamente.

La presbiopia  también llamada  presbicia es aquella alteración de la visión que se produce por un defecto en la acomodación, es decir, el enfoque de los objetos tanto cercano como lejanos. La acomodación es realizada por el cristalino, que es la lente que se encuentra en el ojo.  En el ojo joven la acomodación se produce sin esfuerzo debido a la flexibilidad del cristalino y a los músculos que lo controlan sin embargo con el paso de los años, alrededor de 45-50 años el cristalino pierde su flexibilidad y los músculos que lo controlan se hacen más débiles, disminuyendo como consecuencia la capacidad para enfocar los objetos cercanos.

Es frecuente que a partir de los 45-50 años las personas se den cuenta que tienen dificultades para ver objetos cercanos, siendo necesario alejar los mismos para ver con claridad.

Existen diferentes soluciones para este tipo de alteración:

–          El uso de gafas o lentes de contacto.

–          La intervención quirúrgica:

• Tratamiento laser de la presbicia.
• Cirugia multifocal intraocular del cristalino.

La presbiacusia puede definirse como el deterioro progresivo de la capacidad auditiva por el envejecimiento. Aparece sobre todo a partir de los 60 años de edad y esta favorecido por diferentes factores entre los que se encuentran: antecedentes familiares de hipoacusia, exposición continua a sonidos de intensidad, algunas enfermedades de los oídos, enfermedades metabólicas…

Esta alteración se manifiesta ante la dificultad de los mayores de  60 años a percibir sonidos de tono alto. Empiezan por quejarse por los ruidos que no oyen bien y terminan diciendo que les cuesta entender las cosas cuando los demás se las cuentan.

Existen diferentes tipos de presbiacusia si tenemos en cuenta la parte del oído afectada: sensorial, neural, metabólica, central, conductiva coclear y mixta.

Respecto a la posible solución de esta alteración, tenemos que tener en cuenta en primer lugar aquellas medidas que pueden ayudar a prevenir su aparición como son: evitar la exposición continúa a ruidos, control adecuado de otras enfermedades, realizar ejercicio físico…

Una vez que esta alteración se manifieste las posibles opciones terapéuticas serían: el uso de auriculares y audífonos para aumentar la capacidad auditiva de las personas y mejorar así su comunicación con los demás.