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Terminan las vacaciones de verano y ya comienzan un nuevo curso los más pequeños de la casa. Después de muchos días de diversión ahora es momento de adaptarse a nuevos horarios, clases y otras actividades. En niños también puede aparecer el “síndrome postvacacional” provocando estrés, cansancio, apatía, tristeza, irritabilidad y falta de atención.

Uno de los momentos que más cuesta para muchos es madrugar, ya que los cambios en  ritmos de sueño y vigilia necesitan un periodo de ajuste. Por ello, se recomienda anticiparse al horario progresivamente unos días antes del comienzo de las clases.

Algunas sugerencias para facilitar este proceso de adaptación son las siguientes:

• Adaptación al horario

Es aconsejable comenzar a habituarse al horario escolar de forma progresiva adelantando la hora de despertar y de acostarse para evitar el cansancio en el primer día de clase.

• Hábitos saludables

Se puede aprovechar durante las vacaciones para instaurar estilos de vida saludables como realizar un desayuno completo con tiempo suficiente, en familia y fomentando el diálogo. Un desayuno saludable contribuye a la mejora del rendimiento físico y mental.

• Preparar el material escolar y crear un espacio para el estudio

Preparar con ellos los libros, calendario, agenda, mochila y ropa escolar con motivación. Siempre  hace ilusión estrenar algo nuevo, aunque sea un pequeño detalle le puede ayudar a comenzar el curso con más ganas.

Además, es importante crear un espacio adecuado en casa para estudiar, ordenado y organizado, sin ruido y sin distracciones.

• Establecer unas reglas básicas

En verano hay más flexibilidad en el uso de internet, TV  u otras actividades. Es importante que antes de que comiencen las clases se hable en una reunión familiar de las normas básicas para cada actividad de un modo responsable para que no interfiera en los estudios.

No obstante, para que al niño no se le venga encima una montaña responsabilidades (deberes, estudio…) organizaremos con él actividades distendidas que lo ayudarán a desconectar en el tiempo de ocio.

• Actividades físicas

Es recomendable aprovechar el tiempo libre para salir a realizar actividad física al aire libre ya que es una buena forma de liberar estrés y desconectar de las preocupaciones y miedos.

• Transmitir tranquilidad

Para que la vuelta sea positiva y feliz hay que evitar transmitirles nuestra ansiedad, miedos  o nuestro “síndrome postvacacional”, dando nuestra confianza y apoyo y respondiendo a sus preguntas.

Es importante recalcar todas las cosas positivas que implica el inicio del nuevo curso.

¡LLENA DE ILUSIÓN Y MOTIVACIÓN CADA INSTANTE Y SONRÍE AL NUEVO CURSO!