RESERVA TU CITA ON-LINE O POR TELÉFONO 943 272 146
¿Sabías que los efectos físicos de la ira afectan a tu salud a corto y largo plazo? Pasar por periodos regulares e intensos de ira puede provocar problemas a diversos niveles:
Si los enfados te producen problemas es recomendable que sigas un tratamiento, es posible que puedas necesitar medicación.
CÁLMATE
La vida puede llegar a ser, en ocasiones, estresante, siendo muy fácil que la presión a la que estamos sometidos aumente. Debes intentar hacer pequeños cambios en tu estilo de vida si sufres un problema con el manejo de la ira. Por ejemplo, una carencia de ciertos nutrientes te puede hacer sentirte irritable y débil. Trata de seguir una dieta sana y equilibrada, dormir las horas suficientes y darte a ti mismo placeres o recompensas por acciones, actitudes y pensamientos positivos.
Además, no bebas alcohol en exceso ni tomes drogas ilegales (especialmente estimulantes, como las anfetaminas y la cocaína) ya que incrementará el riesgo de desarrollar un problema a la hora de ser capaz de manejar tu ira.
Incluso cosas sencillas como darte un baño relajante, un buen paseo o leer un libro te pueden ayudar. El ejercicio físico previene que la ira se acumule en tu organismo y mejore tu autoestima. Trata de hacer cosas que te diviertan y te entretengan, como salir a correr o bailar.
AYUDA PROFESIONAL
La terapia cognitivo-conductual es un tipo de apoyo psicológico que te ayuda a cambiar tu forma de pensar sobre ciertas situaciones y a comportarte y a afrontar los problemas de otra forma. No se trata de centrarte en tu comportamiento del pasado, sino en concentrarte en diversas formas de mejorar tus mecanismos para el futuro.
PASOS A SEGUIR
Don’t Worry, Be Happy… Don’t Worry, Be Happy… Don’t Worry, Be Happy… Don’t Worry, Be Happy…